Cierre gubernamental de EE.UU: Impacto y Futuro Incierto

El gobierno federal de los Estados Unidos está avanzando hacia un cierre que, en caso de materializarse, interrumpirá varios servicios, afectará a los trabajadores y agitará el panorama político. Este escenario, propiciado por los republicanos en la Cámara impulsados por demandas de recortes profundos, podría desencadenar una confrontación sobre el gasto federal.

¿Qué significa un cierre del gobierno?

Un cierre del gobierno ocurre cuando el Congreso no logra aprobar alguna forma de legislación de financiamiento que sea promulgada por el presidente. Se supone que los legisladores deben aprobar 12 diferentes proyectos de ley de gasto para financiar agencias en todo el gobierno, pero el proceso es tedioso. A menudo recurren a aprobar una extensión temporal, conocida como resolución continua o CR, para permitir que el gobierno siga operando.

En caso de que no se promulgue ninguna legislación de financiamiento, las agencias federales tendrán que detener todo trabajo no esencial y no enviarán cheques de pago mientras dure el cierre.

Aunque los empleados considerados esenciales, como los controladores de tráfico aéreo y los oficiales de las fuerzas del orden, aún deben presentarse a trabajar, otros empleados federales son suspendidos temporalmente. Según una ley de 2019, se prevé que estos mismos trabajadores reciban el pago retroactivo una vez que se resuelva el impasse de financiamiento.

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¿Cuándo comenzaría el cierre y cuánto durará?

El financiamiento gubernamental expira el 1 de octubre, que marca el inicio del año fiscal federal. El cierre efectivamente comenzará a las 12:01 a.m. si el Congreso no logra aprobar un plan de financiamiento que el presidente firme y convierta en ley.

Es imposible predecir cuánto duraría un cierre. Con el Congreso dividido entre un Senado controlado por los Demócratas y una Cámara liderada por los Republicanos, y el Speaker Kevin McCarthy junto a los conservadores de derecha dura buscando usar el cierre como palanca para recortes de gasto, muchos se están preparando para una interrupción que podría durar semanas.

¿Quiénes se verán afectados?

Millones de trabajadores federales enfrentarán cheques de pago retrasados cuando el gobierno se cierre, incluyendo muchos de los aproximadamente 2 millones de personal militar y más de 2 millones de trabajadores civiles en todo el país.

Cerca del 60% de los trabajadores federales están estacionados en los departamentos de Defensa, Asuntos de Veteranos y Seguridad Nacional.

Los trabajadores federales están distribuidos en los 50 estados y tienen interacción directa con los contribuyentes — desde agentes de la Administración de Seguridad en el Transporte que operan la seguridad en los aeropuertos hasta los trabajadores del Servicio Postal que entregan el correo.

Además de los trabajadores federales, un cierre podría tener efectos amplios en los servicios gubernamentales. Las personas que soliciten servicios gubernamentales como ensayos clínicos, permisos de armas y pasaportes podrían enfrentar demoras.

Implicaciones económicas y políticas

Las empresas estrechamente conectadas al gobierno federal, como los contratistas federales o los servicios turísticos alrededor de los parques nacionales, podrían ver interrupciones y desaceleraciones. El sector de viajes podría perder 140 millones de dólares diarios en un cierre, según la Asociación de la Industria de Viajes de EE. UU.

Los legisladores también advierten que un cierre podría sacudir los mercados financieros. Goldman Sachs ha estimado que un cierre reduciría el crecimiento económico en un 0,2% cada semana que durara, aunque el crecimiento se recuperaría después de que el gobierno reabra.

Proceso Judicial y Trabajo Legislativo

Durante un cierre, el presidente y los miembros del Congreso continuarán trabajando y recibiendo su salario. Sin embargo, cualquier miembro de su personal que no se considere esencial será licenciado temporalmente.

La rama judicial podrá continuar operando durante un tiempo limitado usando fondos derivados de los trámites judiciales y otras tarifas, así como otros fondos aprobados.

Precedentes Históricos

Antes de la década de 1980, las interrupciones en el financiamiento gubernamental no resultaban en un cierre significativo de las operaciones gubernamentales. Sin embargo, desde 1976, ha habido 22 brechas de financiamiento, con 10 de ellas resultando en la suspensión de trabajadores. Pero la mayoría de los cierres significativos han ocurrido desde la presidencia de Bill Clinton.

Finalización del Cierre

Para poner fin a un cierre, es responsabilidad del Congreso financiar al gobierno. La Cámara y el Senado deben acordar financiar al gobierno de alguna manera, y el presidente debe promulgar la legislación.

El Congreso a menudo se apoya en una llamada resolución continua, o CR, para proporcionar fondos provisionales que permitan mantener abiertas las oficinas gubernamentales a los niveles actuales mientras se llevan a cabo las negociaciones presupuestarias. El dinero para prioridades nacionales urgentes, como la asistencia de emergencia para las víctimas de desastres naturales, a menudo se adjunta a un proyecto de ley a corto plazo.

Sin embargo, los republicanos de línea dura afirman que cualquier proyecto de ley temporal es inaceptable para ellos. Están presionando para mantener el gobierno cerrado hasta que el Congreso negocie los 12 proyectos de ley que financian al gobierno, lo cual históricamente ha sido una tarea laboriosa que no se resuelve hasta diciembre, en el mejor de los casos.

Trump, quien es el principal rival de Biden de cara a las elecciones de 2024, está alentando a los republicanos de línea dura.

Si tienen éxito, el cierre podría durar semanas, tal vez incluso más.