Puntos importantes:
- El índice de precios al consumidor aumentó solo un 0,1% en noviembre respecto a octubre y el dato anual se ubicó en 7,1%.
- Los economistas esperaban un incremento de 0,3% mensual y de 7,3% en los últimos doce meses.
- El IPC subyacente, que excluye la energía y los alimentos, también retrocedió más de lo esperado.
- Los futuros de los índices reaccionaron de manera positiva y, al momento de la redacción de este artículo, se disparaban más de un 2%.
Los futuros del Nasdaq, del S&P 500 y del Dow Jones saltaban más de un 2% luego de conocerse los datos inflacionarios de noviembre, que fueron menores a los esperados.
Es que el índice de precios al consumidor aumentó solo un 0,1% de octubre a noviembre y marcó una desaceleración anual que se ubicó en 7,1%. Esto ocurre cuando los economistas proyectaban un incremento de 0,3% mes a mes y de 7,3% en los últimos doce meses. Es decir que, en el último año, la inflación cayó de 7,7% a 7,1%.
En cuanto al IPC subyacente, que excluye los precios de los alimentos y de la energía, subió 0,2% mensual y 6%, anual, frente a las estimaciones respectivas de 0,3% y 6,1%.
Los datos mencionados indican que la inflación se está enfriando y esto podría ser clave para que la Reserva Federal también comience a desacelerar el ritmo de aumentos en las tasas de interés.
Los expertos prevén un incremento de 50 puntos básicos mañana, en lo que sería un recorte después de cuatro aumentos consecutivos de 75 puntos básicos. Además, los inversores esperan el discurso de Jerome Powell, quien podría dar señales de los planes de la Fed para 2023.
Muchos personajes de Wall Street han declarado que temen que la Fed no frene a tiempo y provoque una recesión innecesaria para la economía estadounidense. Otros, sin embargo, creen que la Reserva Federal está actuando de buena manera y se podrá lograr un «aterrizaje suave».