PUNTOS IMPORTANTES:
- XRP quebró un gran hito al alcanzar un nuevo ATH y establecer una capitalización de mercado de más de 200.000 millones de dólares.
- Si bien ahora se ubica en 3,40 USD, la altcoin llegó a cotizar en 3,92 USD, superando su anterior récord que se produjo en 2018 tras llegar hasta los 3,84 USD.
- Esto se produjo luego de que las las ballenas acumularan 9.000 millones de dólares en tokens antes del rally, según datos de blockchain.
- El volumen diario se disparó un 150% hasta 18.000 millones de dólares, mientras su participación de mercado trepó hasta los 5,2%.
El mundo cripto tiene un nuevo protagonista: XRP superó este viernes su máximo histórico de 3,84 USD establecido en 2018, marcando un hito que pocos veían posible.
El token no solo ha batido récords, sino que lo ha hecho con estilo: un 15% de subida en 24 horas que lo ubicó en 3,92 USD, mientras su capitalización de mercado se ubicó momentáneamente por sobre los 210.000 millones de dólares.
Sin embargo, la ganancia cedió levemente y ahora la altoin cotiza cerca de los 3,40 USD, acumulando un aumento de más de 64% en lo que va del año.
¿Por qué se disparó XRP?
Detrás de esta explosión están las famosas ballenas de XRP llevan semanas acumulando de forma agresiva (más de 2.500 millones de tokens comprados según el analista Ali Martínez), mientras el volumen diario se disparó hasta 18.000 millones de dólares, un 150% más que la semana pasada.
Pero lo más sorprendente es el timing: este rally se produce sin grandes anuncios institucionales, lo que sugiere que el mercado está revalorizando XRP por méritos propios.
Los gráticos muestran un escenario de ensueño: tras romper la resistencia clave de 3,50 USD, el token ha entrado en territorio desconocido. «Ahora el siguiente objetivo claro son los 4 USD«, explicó Martínez.
En paralelo, el dominio de XRP en el mercado cripto ha pasado del 3,8% al 5,2% en solo diez días, un crecimiento inédito para un activo de esta capitalización. Mientras, las apuestas por futuros alcanzan máximos de 2025, señalando que los grandes inversores esperan más ganancias en el corto plazo.