PUNTOS IMPORTANTES:
- La inflación en EE. UU. se desaceleró en noviembre, impulsada por la caída de los precios de la energía.
- Biden reconoce la lucha continua contra el alto costo de vida y promete medidas adicionales para reducir los precios.
- Los votantes y economistas relacionan los altos precios con las políticas de Biden, incluyendo los paquetes de estímulo durante la pandemia.
Nuevos datos de la Reserva Federal sugieren que la inflación se enfrió aún más en noviembre. Pero la cruzada del presidente Joe Biden para convencer a los votantes de que sus políticas económicas funcionan está lejos de terminar.
La inflación creció un 0,1 punto porcentual más lento el mes pasado que en octubre, según el Índice de Precios al Consumidor de la Fed publicado el martes. La desaceleración fue impulsada por una caída en los precios de la energía, que compensó un aumento en los precios de alimentos y vivienda.
La noticia llevaba todas las características del «aterrizaje suave» que la Casa Blanca ha prometido durante el último año, especialmente impulsado por datos económicos aún más recientes, como números sólidos de empleo y el aumento de la confianza del consumidor.
Estrategias de Biden frente a la inflación
Sin embargo, Biden en una declaración de la Casa Blanca en respuesta al CPI de noviembre.
«A pesar de este progreso, sé que muchos estadounidenses todavía encuentran demasiadas cosas inaccesibles».
En lugar de realizar una vuelta de la victoria rutinaria, el presidente redobló la guerra, prometiendo hacer él mismo lo que las subidas de tasas de interés de la Reserva Federal no han hecho: abaratar las cosas.
Amplió su ofensiva contra los crecientes costos de los medicamentos recetados, las tarifas ocultas de cable y viajes aéreos, y el «encarecimiento de precios» corporativo. También prometió «seguir luchando para reducir los costos».
Cambio de tono en la política económica
Es un marcado cambio de tono con respecto a las reacciones típicas del presidente a los datos positivos de inflación. En octubre, dijo que el progreso en la inflación demostraba que está «trabajando para obtener resultados para el pueblo estadounidense, y está sucediendo».
Pero ahora, mientras las malas encuestas sobre Bidenomics proyectan una sombra sobre la campaña de reelección del presidente, el tono de Biden ha cambiado. Ya no se centra en declarar victorias económicas, Biden redobla la guerra.
Los votantes responsabilizan al presidente de sus altos alquileres y costosas facturas de supermercado, según encuestas recientes.
Los economistas han atribuido los precios récord de los últimos años a los paquetes de estímulo de la era de la pandemia de Biden, junto con las interrupciones de la cadena de suministro y la demanda reprimida de los consumidores.
Parece tener buena estrategia sin embargo abaratar los precios no ayudaria