Puntos Importantes
- El creador de un proyecto para el Internet de las cosas desea dejar claro su estado mental, asegurando estar en paz consigo mismo.
- Como ya se sabe la Fundación IOTA en una decisión unánime separó de su cargo a David Sønstebø, por «intereses discordantes».
- Sønstebø fundó IOTA en 2015 presentando una blockchain cuyo objetivo era ejecutar transacciones entre dispositivos electrónicos o «Internet de las cosas».
David Sønstebø pretende aclarar que su separación de IOTA además de generar más dudas y preguntas que respuestas, fue una decisión “torpe y poco profesional”. Insiste en que lo ocurrido con la fundación IOTA no es un divorcio definitivo y que en el primer trimestre de 2021 habrá noticias positivas.
Separación definitiva o “solo se trata de una coma” en la redacción de la historia
Aun cuando hace alusión a varios desacuerdos surgidos, entre estos el de la propiedad de algunos proyectos, manifiesta estar confiado en el futuro. Se desprende de las palabras publicadas por Sønstebø en un improvisado blog, que vienen cosas buenas con integrantes de la fundación y con socios externos.
Esta intervención pública del otrora fundador de IOTA efectivamente lanza sobre el tapete el tema acerca del futuro de esta fundación ahora sin Sønstebø. Por otra parte, surge la duda acerca de lo dicho por él mismo respecto de la propiedad de algunos proyectos creados mientras existió la alianza.
Fuma la pipa de la paz y entierra el hacha de la guerra
No sin antes dirigirse de manera directa a algunos de los integrantes de IOTA diciéndoles que no deben denominarse cofundadores porque no lo son; dejó dudas sobre quiénes son los inversores externos y miembros fundacionales con quienes continuará trabajando.
Aduce que su divorcio de IOTA no fue por existir un conflicto de intereses, pero más adelante en su blog asegura que sí pudo ser. Usar expresiones como contradicción entre los intereses propios y existencia de intereses divergentes da suficiente material para que toda la comunidad se pronuncie.
Nadie mira «La columna vertebral» de la economía del «Internet de las cosas»
Mientras todos los inversionistas hablan y sugieren cosas positivas sobre Bitcoin, otra cripto se abre camino a pasos agigantados y en silencio: IOTA. El valor de esta moneda virtual se ha incrementado en más de un 774% desde el pasado noviembre y aparentemente nadie se ha percatado de ello.
Este producto de inversión virtual ha sufrido una descomunal alza que ciertamente podría compararse con BTC, pero lo extraño es que nadie ha hecho mención. Esto puede generar la pregunta de por qué nadie mira a la autodenominada columna vertebral de la economía del Internet de las cosas.
Respuestas pueden esperarse, así que amanecerá y veremos.