PUNTOS IMPORTANTES:
- Michael Burry afirmó que Tesla está “ridículamente sobrevalorada” y apuntó su continua dilución accionarial del 3,6% anual sin recompras.
- Advierte que el paquete salarial de 1 billón de dólares de Elon Musk podría profundizar esa dilución y presionar aún más a los inversores.
- Además, señaló que el precio de Tesla se basa en expectativas irreales y alertó sobre una posible burbuja en el sector tecnológico.
Michael Burry, el inversor que anticipó la crisis de 2008 y cuya historia inspiró The Big Short, criticó duramente a Tesla (TSLA). En su último boletín, publicado el 30 de noviembre, describió las acciones del fabricante de coches eléctricos como“ridículamente sobrevaloradas”, una afirmación que ha reactivado el debate sobre si el mercado está viviendo otra fiebre especulativa.
Burry no es nuevo en las advertencias contra grandes compañías tecnológicas, pero esta vez afinó el tiro directamente hacia los fundamentos de Tesla. Según su análisis, la empresa lleva años diluyendo a sus accionistas a un ritmo estimado del 3,6% anual. Lo más llamativo, dice, es que esta dilución continúa sin que Tesla realice recompras que compensen el efecto. Para él, es una señal evidente de que algo se está estirando más de la cuenta.
El inversor también puso el foco en el controvertido paquete salarial de Elon Musk, valorado en 1 billón de dólares. Si el CEO cumple los objetivos de rendimiento pactados, la dilución de los accionistas podría dispararse todavía más. En otras palabras, el pastel crece, pero las porciones destinadas a cada inversor podrían seguir reduciéndose.
Burry cuestionó además cómo el mercado está valorando a Tesla. Sostuvo que su precio actual descansa en expectativas irreales de crecimiento perpetuo y en modelos de descuento que ignoran riesgos fundamentales. Para él, la capitalización de mercado de la firma se ha convertido en un reflejo del entusiasmo colectivo, más que de sus cifras reales.
Michael Burry también opinó sobre otras tecnológicas
Esta advertencia se suma a otras que el propio Burry lanzó recientemente contra gigantes como Nvidia y Palantir. El mensaje es el mismo: el sector tecnológico podría estar repitiendo patrones de sobrevaloración que ya hemos visto antes. Incluso insinuó que la infraestructura de la nube (uno de los motores de crecimiento más celebrados de los últimos años) podría estar inflada y expuesta a una corrección brusca.
Mientras Tesla sigue siendo uno de los activos más debatidos del mercado, la aparición de Burry recuerda que no toda subida es sinónimo de solidez, y que los vientos de euforia pueden cambiar en cualquier momento.
Cabe destacar que las acciones de Tesla se han recuperado más de un 30% en los últimos tres meses y ya registra un incremento de 6,5% en lo que va del año.














