Puntos importantes:
- Bitcoin ha alcanzado una correlación con el oro que no se veía en varios años, superando su correlación con las acciones estadounidenses.
- Tanto Bitcoin como el oro han aumentado su valor desde la crisis bancaria de marzo, lo que sugiere que los inversionistas ven a ambos activos como una posible reserva de valor.
- Grandes inversionistas ya han disminuido su riesgo, lo que puede explicar la disminución de la conexión entre Bitcoin y las acciones tecnológicas.
La correlación de Bitcoin con el oro alcanzó un máximo de varios años la semana pasada y actualmente supera al 50% su correlación con las acciones estadounidenses.
Bitcoin ha resistido muy bien la actual inestabilidad en la industria financiera y la creciente incertidumbre regulatoria, con un aumento de más del 70% YTD, superando ampliamente a los activos tradicionales, ya que se ve al ‘oro digital’ como un potencial refugio de valor.
Las estadísticas indican un creciente porcentaje de inversionistas a largo plazo de Bitcoin, esto podría sugerir que el atractivo de Bitcoin como activo refugio está en ascenso, según datos de Kaiko publicados el 3 de abril.
Es importante destacar que tanto el principal activo digital como el metal precioso sufrieron importantes caídas el año pasado. Sin embargo, el oro ha experimentado un aumento de precio del 8,6% desde el colapso de Silvergate el 8 de marzo que provocó la crisis bancaria, acercando el precio a su máximo histórico de 2.000 USD, que se obtuvo poco después del inicio de la invasión de Rusia en Ucrania.
Con Kaiko señalando en octubre:
«Después de beneficiarse del conflicto entre Rusia y Ucrania en el primer trimestre del año, el oro ha perdido todas sus ganancias y actualmente está bajando un 10% YTD. Bitcoin también ha disminuido en cifras de dos dígitos este año, arrastrado por el ajuste de la política monetaria global».
Además, «el oro ha fallado en actuar como un activo refugio, es decir, un activo que se espera que mantenga o aumente su valor durante períodos de desaceleración económica», a pesar de que «la inflación subyacente sigue siendo persistentemente alta».
Bitcoin y las acciones tecnológicas
Los grandes inversionistas macro ya han reducido su riesgo, lo que podría explicar la disminución de la conexión con las acciones tecnológicas.
Mientras tanto, el Nasdaq 100 ha entrado oficialmente en un mercado alcista (con un aumento del 20% o más desde sus mínimos de diciembre), y la volatilidad ha disminuido. Después del colapso de FTX, la disparidad entre la volatilidad de las criptomonedas y el mercado de valores de EE. UU. se ha vuelto cada vez más amplia.
La volatilidad de BTC puede atribuirse en parte a la falta de liquidez. Dado que Binance, el exchange más grande y líquido, enfrenta restricciones regulatorias que podrían aumentar la aversión al riesgo entre los creadores de mercado, es poco probable que esta situación cambie.
En medio de preocupaciones sobre el colapso económico, Robert Kiyosaki, autor del best-seller de finanzas personales «Padre Rico, Padre Pobre», ha advertido sobre el estado de la economía global, citando a las decisiones de la Reserva Federal de los Estados Unidos como el catalizador de un inminente colapso del mercado.
Kiyosaki cree que existen alternativas para proteger a los inversionistas contra los efectos de una posible caída económica, destacando que Bitcoin y metales preciosos, como el oro y la plata, son activos valiosos para protegerse contra las crecientes presiones inflacionarias.