PUNTOS IMPORTANTES:
- Automotriz enfrenta alzas de costos por nuevas tarifas.
- Tesla y Ford, mejor posicionadas ante impacto arancelario.
- Marcas alemanas, las más perjudicadas por los cambios.
Tesla (TSLA) y Ford (F) lideran el nuevo escenario automotriz tras ajuste de tarifas
Las recientes modificaciones en las tarifas de importación anunciadas por el presidente Trump están redefiniendo el panorama automotriz. Si bien se mantiene un arancel del 25% para vehículos importados, se alivió la presión sobre autopartes, dando margen de maniobra a los fabricantes locales.
Según el análisis de Guggenheim, Tesla emerge como el gran ganador del nuevo esquema. Al fabricar todos sus vehículos en Estados Unidos, y gracias a los créditos por partes nacionales, la compañía no enfrenta aumento alguno en su estructura de costos. Ford también sale bien posicionada, con un incremento estimado de solo 1.277 dólares por unidad, frente a los 1.866 dólares que impactarán a General Motors.
El nuevo cálculo de impacto por unidad bajó de más de 6.000 dólares a poco más de 3.000 dólares, equivalente al 6%del precio promedio de un auto. Aun así, algunas marcas verán subas de hasta 17% por modelo, mientras otras no enfrentarán cambios.
Las empresas más afectadas son las automotrices alemanas. Volkswagen (VOW3), BMW (BMW) y Mercedes-Benz (MBG) registrarán aumentos por unidad de 5.941, 8.237 y 11.894 dólares, respectivamente. Estos costos podrían trasladarse al precio final o reducir márgenes.

Honda, pese a un impacto menor a los 2.000 dólares, proyecta una caída de utilidades operativas de 8.300 a 3.400 millones de dólares para su año fiscal 2026, debido a un golpe de 3.600 millones en su segmento automotriz. Stellantis suspendió su guía anual tras las medidas.

Aunque las marcas estadounidenses parecen resistir mejor, Guggenheim estima que se venderán un millón menos de autos en 2025, con un total proyectado de 15 millones, por debajo de los 16 millones de 2024. Las acciones reflejan esa tensión: Ford se mantiene estable desde noviembre, GM cayó 6% y Stellantis 22%, mientras Tesla sube 38%, impulsada más por expectativas de crecimiento que por cuestiones arancelarias.
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