PUNTOS IMPORTANTES:
- El Producto Interno Bruto de EE.UU. aumentó un 0,3% en el primer trimestre del año en comparación a los últimos tres meses de 2022.
- De todas formas, la economía creció a un ritmo trimestral anualizado del 1,3% en el primer trimestre, frente al 1,1% anunciado inicialmente.
- Este es el tercer dato consecutivo de expansión de la economía, por lo que una recesión técnica está cada vez más lejos.
Muchos economistas anticipaban una recesión en Estados Unidos pero, al parecer, no va a llegar pronto. La Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio informó este jueves que el PIB creció a una tasa trimestral anualizada del 1,3% en el primer trimestre del año, es decir un 0,3% frente a los últimos tres meses de 2022.
Los expertos proyectaban un incremento del 1,1% y, si bien los datos reales superaron las estimaciones, el crecimiento es claramente menor que el 2,6% de ritmo anualizado con que se despidió 2022, equivalente a una tasa trimestral del 0,7%. Sin embargo, es el tercer dato consecutivo de expansión de la economía.
El aumento del PIB se debió principalmente al gasto de los consumidores, las exportaciones, el gasto del gobierno federal, el gasto de los gobiernos estatales y locales y la inversión fija no residencial, que se vieron compensados en parte por descensos en la inversión en inventarios privados y la inversión fija residencial. Las importaciones, que restan en el cálculo del PIB, aumentaron, reveló la Oficina de Análisis Económico.
También cabe aclarar que hay sectores que están sufriendo el aumento de las tasas de interés, como la construcción. De todas formas, el mercado laboral sigue muy sólido, con la tasa de desempleo en 3,4%, su mínimo en más de medio siglo.
A pesar de estos datos que parecen positivos, la Reserva Federal continúa sosteniendo que la economía estadounidense entrará en recesión a finales de este año, según las actas de su última reunión, divulgadas este miércoles.
¿Los argumentos? «Hay un nuevo endurecimiento previsto de las condiciones de crédito bancario, en medio de unas condiciones financieras ya de por sí restrictivas. Se preveía una desaceleración del PIB real en los dos trimestres siguientes, antes de registrar un modesto descenso tanto en el cuarto trimestre de este año como en el primero del próximo”.