Puntos Importantes
- La familia Taihuttu vendió todas sus pertenencias y decidieron apostar en la criptomoneda en 2017 cuando apenas valía $900 dólares.
- En solo tres años recorrieron más de 40 países solamente de las ganancias que les dio Bitcoin.
- Cuando en precio de la critpo más popular se hundió, la familia decidió invertir aún más en el activo.
¿Se imaginan tener su propia casa, su carro y algunos ahorros y vender todo para invertir en un activo? Bueno la familia Taihuttu se arriesgó, apostó todo en Bitcoin y la jugada les salió maravillosamente bien.
Hace más de tres años, el holandés Didi Taihuttu, junto a su esposa y tres hijas decidieron cambiar su estilo de vida y para eso vieron que era necesario además de una oportunidad invertir en la criptomoneda que en ese entonces cotizaba en $900 dólares por unidad.
En solo unos meses, Bitcoin tuvo un salto increíble que llegó a superar los $19 mil dólares, algo que le permitió a la familia cumplir su sueño de viajar por el mundo. Desde ese entonces, los Taihuttu recorrieron más de 40 países y dejaron atrás sus cuentas bancarias y los bienes a su nombre. Solo compraron una camioneta con la que se trasladan y más bitcoins. “Entramos en Bitcoin porque queríamos cambiar nuestras vidas”, afirmó Didi a CNBC.
Cuando Bitcoin colapsó hace dos años y lejos de retirarse del mundo cripto, el padre de familia decidió sumar aún más bitcoins a su cartera de inversiones y hasta se animó a proyectar un precio futuro: «Creo que en este ciclo alcista, veremos un pico mínimo de $100.000 dólares. No me sorprendería que llegue a los $200.000 dólares en 2022«, indicó en la entrevista.
Al igual que muchos inversores, Taihuttu es optimista con el futuro para Bitcoin: “No veo que la demanda baje. Creo que nos dirigimos a una crisis de suministro”. Según expresó, la cripto está atravesando un buen momento y está lejos de ser una «burbuja», por lo que no representa un riesgo de que su precio vuelva a bajar considerablemente.
Por otra parte, Didi mencionó que no planea dejar de invertir en bitcoins ya que además de confiar en el activo le da suficiente ganancia para mantener su modo de vida. Por último, los Taihuttu ya donaron la mitad de su dinero a obras de caridad y beneficencia.