PUNTOS IMPORTANTES:
- FTX contrata a Galaxy Digital de Mike Novogratz para administrar sus criptoactivos recuperados.
- FTX evita vender criptomonedas directamente para no inundar y devaluar el mercado.
- Sam Bankman-Fried, fundador de FTX, enfrenta acusaciones por malversación y fraude a inversores.
El intercambio de criptomonedas FTX, que enfrenta problemas, ha contratado a una destacada firma de gestión de activos cripto, Galaxy Digital, para administrar sus activos digitales recuperados.
Según una reciente presentación judicial, el intercambio de criptomonedas en quiebra solicita autorización para que la empresa de Mike Novogratz, Galaxy Digital, se encargue de la gestión de sus monedas virtuales recuperadas como parte de su proceso de reestructuración.
“Los Deudores buscan autorización para que FTX Trading Ltd. celebre un Acuerdo de Servicios de Inversión con Galaxy Digital Capital Management. Se seleccionó a Galaxy Asset Management como asesor de inversiones basándose en su sofisticación y cualificaciones… Además, los Deudores han determinado que la estructura de tarifas propuesta del Acuerdo de Servicios de Inversión refleja adecuadamente la naturaleza de los servicios que Galaxy Asset Management proporcionará y contiene términos y condiciones razonables.”
El documento indica que FTX no puede vender las criptomonedas recuperadas en un intercambio, ya que ello podría generar un shock de oferta y afectar negativamente los precios de los activos digitales.
“Si los Deudores intentaran vender grandes posiciones de activos digitales directamente en un intercambio, correrían el riesgo de ‘inundar el mercado’ y de devaluar dichos activos digitales.”
FTX solicitó la quiebra en noviembre de 2022 después de detener las retiradas de fondos de los clientes. Sam Bankman-Fried, fundador y ex director ejecutivo, es acusado de malversación de miles de millones en fondos de clientes y fraude a inversores. De ser condenado, enfrentaría muchos años en prisión.
En junio, FTX logró recuperar criptoactivos por un valor de 7 mil millones. Sin embargo, informes de esa época señalaban que el intercambio adeudaba a sus clientes alrededor de 8.7 mil millones.