PUNTOS IMPORTANTES:
- El rally bursátil en China se desvaneció tras un anuncio de estímulo que decepcionó a inversionistas
- El gobierno anunció 200.000 millones de yuanes para proyectos de inversión, pero faltaron detalles
- Economistas cuestionan si las medidas serán suficientes para impulsar la economía y alcanzar el objetivo de crecimiento
Un rally bursátil en China se ha desvanecido ya que un anuncio muy anticipado sobre planes para impulsar la debilitada economía del país decepcionó a los inversionistas.
Las acciones habían subido más del 10% cuando se reinició el comercio después de las vacaciones de la Semana Dorada, pero cayeron después de una conferencia de prensa de los planificadores económicos del país.
Después de un día volátil de comercio, el Índice Compuesto de Shanghái en la China continental cerró con un alza del 4,6%, mientras que el Hang Seng en Hong Kong cayó un 9,4%.
Los inversionistas habían estado esperando más información sobre cómo el gobierno planea apoyar el crecimiento económico, pero el anuncio ofreció pocos detalles.
El presidente de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China, Zheng Shanjie, dijo que está «totalmente confiado» en que el país logrará sus objetivos económicos y sociales para todo el año. Pero añadió:
«Las presiones a la baja sobre la economía de China también están aumentando».
Los comentarios del Sr. Zheng se produjeron mientras anunciaba que China emitirá 200.000 millones de yuanes (28.000 millones de dólares) para proyectos de gasto e inversión para fines de este año.
Economistas cuestionan el estímulo gubernamental
«La mercado realmente esperaba más. La corrección será aún más fuerte si los datos de la Semana Dorada en términos de consumo son débiles.
El mercado está reaccionando a la falta de un verdadero estímulo fiscal. Yo no habría organizado una conferencia de prensa para no anunciar nada nuevo».
Alicia García-Herrero, economista jefe para la región de Asia Pacífico en el banco de inversión Natixis.
El gobierno chino ha estado tratando de impulsar la confianza en la segunda economía más grande del mundo a medida que aumentan las preocupaciones de que pueda no alcanzar su propio objetivo de crecimiento anual del 5%.
Los inversionistas han estado vertiendo en acciones chinas desde que los funcionarios comenzaron a implementar una serie de medidas destinadas a impulsar la economía.
Los planes incluían ayuda para la industria inmobiliaria del país, afectada por la crisis, apoyo para el mercado de valores, entregas de efectivo para los pobres y más gasto gubernamental.
Pero algunos economistas han cuestionado si las políticas serán suficientes para solucionar los problemas económicos de China.
Dicen que podrían ser necesarias reformas profundas para encaminar al país hacia una senda de crecimiento más sostenible.
El crecimiento se ha estado desacelerando en la segunda economía más grande del mundo, ya que continúa enfrentando una caída del mercado inmobiliario, precios en descenso y otros desafíos.