PUNTOS IMPORTANTES:
- Trump planea eliminar regulaciones clave para vehículos eléctricos, afectando a Tesla y a otros fabricantes.
- La eliminación de créditos fiscales y estándares de CARB impactaría directamente los ingresos por créditos ZEV.
- Tesla sigue mostrando fortaleza en Wall Street, impulsado por su liderazgo en inteligencia artificial.
Trump busca eliminar el mandato de vehículos eléctricos: Impacto en Tesla y la industria automotriz
El presidente Donald Trump ha anunciado su intención de poner fin al mandato de vehículos eléctricos (EV, por sus siglas en inglés) en Estados Unidos, generando incertidumbre en el sector automotriz, especialmente para Tesla y los fabricantes emergentes de EV. Aunque no existe un mandato explícito, las regulaciones de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) han impulsado la transición hacia vehículos eléctricos a través de restricciones de emisiones. Este movimiento podría tener implicaciones significativas para Tesla, un líder en el mercado de EV.
El “mandato” al que Trump se refiere incluye reglas de la EPA que penalizan a los fabricantes de automóviles que no cumplan con los estándares de emisiones. Trump podría relajar estas normas mediante un proceso regulatorio, pero no eliminaría por completo el mandato debido a las regulaciones independientes de la Junta de Recursos del Aire de California (CARB). Este organismo no solo regula las emisiones en California, sino también en varios estados que adoptan sus estándares.
CARB y el impacto de las regulaciones en Tesla (TSLA)
La CARB ha sido crucial para el éxito de Tesla. Este organismo permite que la empresa obtenga créditos de vehículos de cero emisiones (ZEV) al superar los requisitos de fabricación de EV, lo que le ha generado casi 10.000 millones de dólares en ventas desde 2018. Estos créditos representan aproximadamente el 25% de las ganancias operativas de Tesla en este periodo. Además, otros fabricantes emergentes, como Rivian, dependen de estos créditos para sus ingresos, proyectando ventas de 300 millones de dólares en 2024.
Si Trump elimina la autoridad de CARB mediante un proceso federal, Tesla y otras empresas de EV podrían enfrentar una disminución en el valor de estos créditos. Esto impactaría negativamente sus ingresos y, posiblemente, la competitividad en el mercado. Sin embargo, esta acción requeriría un complejo proceso legal que podría extenderse durante años.
Créditos fiscales para EV: Una posible eliminación
Otro posible cambio sería la eliminación del crédito fiscal federal de hasta 7.500 USD por la compra de vehículos eléctricos, un incentivo clave para los consumidores. Eliminar este beneficio requeriría apoyo legislativo, ya que está protegido bajo la Ley de Reducción de la Inflación aprobada en el gobierno de Biden. Sin este incentivo, el costo inicial de los EV podría desincentivar su adopción.
Aunque la administración Trump busca reducir la presión regulatoria, algunos analistas creen que esto podría beneficiar a los fabricantes nacionales al equilibrar la oferta y demanda de EV con las regulaciones actuales. En 2024, los estadounidenses compraron 1,3 millones de autos eléctricos, representando el 8% de las ventas totales de vehículos nuevos. Sin embargo, las normas actuales proyectan que el 50% de los vehículos nuevos sean eléctricos para 2032, lo que requeriría un crecimiento anual promedio del 27%.
Perspectivas de Tesla bajo una administración Trump
A pesar de la incertidumbre regulatoria, Tesla sigue atrayendo interés en Wall Street. Sus acciones aumentaron un 2% en el mercado previo, alcanzando los 435,13 USD, impulsadas por un ajuste positivo del precio objetivo por parte de Piper Sandler, que ahora lo sitúa en 500 USD. Según los analistas, los inversionistas comienzan a percibir a Tesla como líder en inteligencia artificial gracias a sus avances en tecnología de conducción autónoma y robótica humanoide.
Desde las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, el precio promedio objetivo para las acciones de Tesla ha aumentado en 91 USD, alcanzando los 326 USD, aunque sigue por debajo del precio actual. Los inversionistas creen que la administración Trump podría beneficiar a Tesla, posiblemente mediante la creación de estándares federales que aceleren la adopción de la tecnología de conducción autónoma.