PUNTOS IMPORTANTES:
- Récord de Endeudamiento de EE.UU.: La deuda estadounidense superó los 32 billones en junio y aumentó 658 mil millones más para agosto.
- Advertencia Global de la ONU: La deuda pública mundial alcanza un máximo histórico de 92 billones en 2022, quintuplicando las cifras del año 2000.
- Crisis en Países en Desarrollo: 52 naciones enfrentan graves problemas de endeudamiento, y muchas priorizan pagos de intereses sobre educación y salud pública.
La deuda pendiente de Estados Unidos ha alcanzado cifras sin precedentes, suscitando preocupaciones a nivel global. Según datos recientes del sistema gubernamental FiscalData, la deuda estadounidense experimentó un aumento alarmante de 54.9 mil millones en un breve período de cinco días.
El 16 de junio, el país cruzó el umbral de los 32 billones en deuda. Sorprendentemente, para el 10 de agosto, este número había escalado en otros 658 mil millones. Pero Estados Unidos no está solo en esta espiral de endeudamiento.
Las Naciones Unidas han emitido una advertencia sombría acerca de la magnitud de la deuda que se está acumulando a nivel mundial. Los datos indican que la deuda pública global ha alcanzado un récord histórico en 2022, situándose en unos asombrosos 92 billones. Para contextualizar, esto representa un incremento de cinco veces la cifra registrada en el año 2000.
El Secretario General de la ONU, António Guterres, resaltó el impacto desproporcionado de esta crisis de endeudamiento en las naciones en desarrollo. Comentó: «Los países africanos, de media, enfrentan costos de endeudamiento que son cuatro veces superiores a los de Estados Unidos y hasta ocho veces mayores que las principales economías europeas.»
De hecho, la situación en algunos países en desarrollo es tan crítica que 52 de ellos, lo que representa casi el 40% del mundo en desarrollo, están lidiando con graves problemas de endeudamiento. La ONU también destaca un dato preocupante: al menos 19 de estas naciones están destinando más recursos a los pagos de intereses que a la educación. Además, 45 países invierten más en intereses que en salud pública.
Ante este panorama, la ONU está haciendo un llamado urgente. La organización aboga por una revisión y reforma profunda de la estructura financiera mundial. El objetivo es garantizar que las naciones en desarrollo tengan acceso a financiación a largo plazo a tasas asequibles y, al mismo tiempo, asegurar que cuenten con liquidez suficiente en momentos de crisis financiera.