PUNTOS IMPORTANTES:
- Los bancos surcoreanos son una oportunidad de inversión por sus bajas valoraciones.
- Las reformas legales prometen mitigar el “descuento coreano” y aumentar la confianza inversionista.
- Factores macroeconómicos como la baja natalidad y tensiones geopolíticas afectan el panorama.
Mercado de Corea del Sur: Análisis del impacto político y sectores clave para 2025
La reciente crisis política en Corea del Sur ha generado incertidumbre en su mercado financiero, con implicaciones tanto a corto como a largo plazo. El intento de golpe del presidente Yoon Suk Yeol el pasado 3 de diciembre desató una respuesta contundente del Parlamento, que anuló la declaración de ley marcial en menos de 24 horas. Sin embargo, el panorama político se ha vuelto más complejo tras la destitución del mandatario por parte del Parlamento y la incertidumbre sobre la decisión final de la Corte Suprema, la cual podría tomar meses.
El efecto inmediato de este caos se reflejó en la caída del fondo cotizado iShares MSCI South Korea (EWY) en un 8% tras el intento de golpe, lo que acumuló una pérdida del 22% para 2024. Sin embargo, los analistas esperan que 2025 sea un año más favorable, especialmente si se producen elecciones anticipadas que favorezcan al opositor Partido Democrático (DP). Este partido ha prometido reformas clave al código comercial, incluyendo el establecimiento de un deber fiduciario de los directores corporativos hacia los accionistas.
Reformas legales: Un cambio estructural necesario
El actual código comercial surcoreano exige a los directores corporativos un “deber de lealtad hacia la empresa”. Según Jonathan Pines, gestor de portafolio de Federated Hermes, esta definición ha contribuido al conocido “descuento coreano”, donde las acciones locales cotizan significativamente por debajo de sus pares internacionales. Este fenómeno es alimentado por prácticas como contratos con empresas relacionadas, estructuras de acciones cruzadas y dividendos limitados, que benefician principalmente a los conglomerados chaebol.
Taiwán, con una composición tecnológica similar, cotiza al doble de los múltiplos de Corea del Sur, lo que pone en evidencia las ineficiencias del sistema surcoreano. La implementación de un marco legal más estricto, como el propuesto por el Partido Democrático, podría mejorar significativamente la percepción de los inversionistas y elevar las valoraciones del mercado.
El programa “Value-Up” introducido por Yoon en febrero pasado tuvo un impacto limitado debido a su carácter voluntario. Sin embargo, los expertos ven potencial en reformas más obligatorias. Entre los chaebol, Hyundai Motor se destaca como el más amigable con los accionistas, con planes para retornar el 35% de sus beneficios a través de dividendos o recompras de acciones.
Oportunidades en el sector bancario
A pesar del control predominante de los chaebol en la economía surcoreana, el sector bancario representa una excepción interesante. Los bancos, fuera del control de estos conglomerados, han adoptado con mayor entusiasmo las iniciativas del programa Value-Up. Esto los posiciona como una opción atractiva para los inversionistas.
El gigante del sector, KB Financial Group, ha visto una caída del 15% en el valor de sus acciones desde diciembre, lo que redujo sus ganancias acumuladas en 2024 al 60%. Daniel Hill, analista de William Blair Investment Management, señala que las valoraciones actuales de los bancos coreanos están notablemente deprimidas, rondando 0,5 veces su valor contable para los jugadores nacionales y 0,3 veces para los regionales. Según Hill, el valor justo debería situarse al menos en 0,7 veces, lo que sugiere una oportunidad de inversión interesante a pesar de desafíos como la fuerte competencia y el alto endeudamiento de los consumidores.
Factores macroeconómicos a considerar
El mercado surcoreano no solo enfrenta desafíos políticos, sino también macroeconómicos. Entre los problemas estructurales más destacados se encuentran la baja tasa de natalidad, la más baja del mundo, y la caída de los precios de la vivienda, que han disminuido un 8% desde su pico en 2022.
Además, la reelección de Donald Trump en Estados Unidos añade un factor de incertidumbre geopolítica. Corea del Sur, cuyo comercio exterior está dividido casi equitativamente entre Estados Unidos y China, podría enfrentar mayores complicaciones en un entorno proteccionista. Sin embargo, los productos de alta tecnología, como semiconductores y maquinaria, siguen siendo difíciles de sustituir en el mercado global, lo que da cierta resiliencia al sector exportador surcoreano.