PUNTOS IMPORTANTES:
- El mercado de bonos se estabiliza tras el downgrade y la venta masiva.
- Los inversores apuestan por recortes de tasas y menor emisión a largo plazo.
- El déficit se mantiene alto pero dentro de las proyecciones previas.
El mercado de bonos encuentra calma pese al déficit y la política fiscal
Pese al reciente aumento del déficit y al ruido legislativo en torno al gasto, los inversores en bonos estadounidenses se mantienen optimistas. Tras un fuerte ajuste en mayo, el mercado se estabilizó.
El detonante fue una combinación de señales. Por un lado, datos de inflación más bajos de lo esperado. Por otro, señales de que el Tesoro limitará las subastas de deuda a largo plazo.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a más de 10 años incide directamente sobre tasas hipotecarias y otros créditos. Aumentan si se anticipa una mayor emisión o tasas más altas de la Fed.
Pero el mercado reacciona más a las expectativas futuras que al déficit actual. Si los inversores creen que los déficits serán sostenidos o crecientes, el ajuste en rendimientos suele anticiparse.

Previsiones fiscales se mantienen dentro de rangos esperados
El retroceso de los bonos el mes pasado coincidió con el avance de un paquete fiscal en la Cámara. La CBO estimó que podría elevar el déficit en 2,4 billones de dólares en 10 años.
Sin embargo, los inversores ya anticipaban que los recortes impositivos de 2017 serían extendidos, incluso bajo gobiernos demócratas. El impacto neto fue moderado y no alteró el consenso de mercado.
Además, el proyecto contempla ajustes como recortes a Medicaid y aumentos en ingresos aduaneros. Por eso, la previsión oficial del déficit para 2026 apenas subió de 1,9 a 2 billones.

El temor se amplificó cuando Moody’s recortó la calificación crediticia de EE. UU. en mayo. Pero la reacción fue breve. Las tasas cayeron tras una subasta débil de bonos japoneses y datos de inflación tibios.

El Tesoro también dio señales de moderación. Aunque el mercado esperaba aumentos en la emisión de deuda a largo plazo, el gobierno postergó cualquier ajuste hasta 2026 o más adelante.
La emisión de deuda a corto plazo mediante letras podría llegar al 25 % del total en 2027, sin generar tensiones significativas. Los fondos monetarios ya han mostrado fuerte apetito por ese instrumento.

Descargo de responsabilidad: Toda la información encontrada en Bitfinanzas es dada con la mejor intención, esta no representa ninguna recomendación de inversión y es solo para fines informativos. Recuerda hacer siempre tu propia investigación.
Excelente, la resena