PUNTOS IMPORTANTES:
- Los rendimientos del Tesoro y el índice del dólar del WSJ aumentan tras los nuevos datos.
- La revisión del PIB del segundo trimestre indica un crecimiento más fuerte del 3%.
- Las solicitudes de desempleo en EE. UU. disminuyen, mostrando un mercado laboral sólido.
Suben los rendimientos del Tesoro y el dólar tras nuevos datos de EE. UU.
Los signos de resiliencia económica en Estados Unidos impulsan los rendimientos del Tesoro y el dólar al alza, mientras aumentan las indicaciones de que la Reserva Federal (Fed) podría no necesitar recortar las tasas de interés de manera tan agresiva como se pensaba. Una segunda revisión del Producto Interno Bruto (PIB) del segundo trimestre sitúa el crecimiento del período en 3%, frente a un pronóstico de 2,8%. El índice de precios del gasto de consumo personal (PCE) subió un 2,5% en el trimestre, desacelerándose desde el 2,6% en la primera estimación.
Revisión del PIB y PCE: señales de desaceleración controlada
Una revisión adicional del PIB muestra que la economía estadounidense creció un 3% en el segundo trimestre, superando la previsión anterior de 2,8%. Esto refleja una economía más fuerte de lo que se esperaba, lo que podría reducir la necesidad de recortes de tasas por parte de la Fed. Al mismo tiempo, el índice de precios del gasto de consumo personal (PCE) aumentó un 2,5% trimestre a trimestre, una leve desaceleración desde el 2,6% reportado inicialmente.
Rendimientos del Tesoro y el índice del dólar en aumento
Los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años alcanzaron el 3,862%, mientras que el índice del dólar del Wall Street Journal (WSJ) subió un 0,2%, ambos recuperándose de caídas anteriores. Estos movimientos reflejan una confianza renovada en la economía estadounidense, que podría mantener las tasas de interés más altas por más tiempo de lo anticipado.
Disminución de solicitudes de desempleo: mercado laboral aún sólido
Las solicitudes de beneficios por desempleo en Estados Unidos disminuyeron a 231.000 desde un nivel revisado al alza de 233.000, superando ligeramente el consenso de 230.000. Este descenso sugiere que el mercado laboral sigue siendo fuerte, a pesar de las preocupaciones por un posible debilitamiento económico. Esto refuerza la idea de que la Fed podría no tener que relajar su política monetaria en el corto plazo.