PUNTOS IMPORTANTES:
- El cofundador de Microsoft, Bill Gates, ha comprado una participación significativa en Heineken Holding NV.
- La empresa propietaria de Budweiser enfrenta dificultades tras un boicot iniciado por activistas conservadores.
- A pesar de no ser un gran bebedor de cerveza, Gates ha realizado inversiones estratégicas en la industria cervecera.
Bill Gates, cofundador de Microsoft Corp. y multimillonario, sigue causando revuelo con su reciente incursión en la industria cervecera. Gates ha acaparado los titulares al adquirir una participación sustancial en Heineken Holding NV, una empresa neerlandesa valorada en casi mil millones de dólares.
La transacción, que tuvo lugar el 17 de febrero, implicó que Gates adquiriera 10.8 millones de acciones valoradas en 939.87 millones de dólares, según la presentación de la Autoridad de Mercados Financieros (AFM) de los Países Bajos. La adquisición coincidió con la venta significativa de acciones de Heineken por parte de FEMSA, el principal accionista mexicano de la compañía. La inversión oportuna llega poco antes de que la controversia en torno a Anheuser-Busch continúe creciendo.
El interés de Gates en Heineken no sorprende a aquellos familiarizados con sus inversiones anteriores relacionadas con la cerveza. En 2007, Gates realizó una compra de 392 millones de dólares de una participación en FEMSA. Pero FEMSA vendió su cervecería a Heineken en 2010, lo que llevó a Gates a redirigir su inversión hacia el gigante cervecero neerlandés. Ahora, con su participación significativa en Heineken, Gates solidifica su posición en el mercado global de la cerveza.
A pesar de sus considerables inversiones, Gates ha sido franco sobre su preferencia personal cuando se trata de cerveza. En una sesión de «Ask Me Anything» en Reddit, Gates escribió: «No soy un gran bebedor de cerveza». Compartió que cuando asiste a eventos como juegos de béisbol, opta por la cerveza light para encajar con otros entusiastas de la cerveza, disculpándose con los «verdaderos bebedores de cerveza» que podrían haber esperado una respuesta diferente.
Anheuser-Busch InBev SA (AB InBev), que posee Budweiser, está enfrentando sus propios desafíos. Un boicot iniciado por activistas conservadores ha resultado en una caída del 15,39% en las acciones de AB InBev en el último mes. La caída ha eliminado más de 17 mil millones de dólares del valor de mercado de la compañía.
Según informes del 30 de mayo, las ventas de Bud Light han experimentado su peor semana de la historia, cayendo un 25,7%. Esto sigue a la caída de la semana anterior del 24.6% y marca la sexta semana consecutiva de disminución de ventas desde el respaldo de Bud Light por parte del influencer transgénero Dylan Mulvaney el 1 de abril. Según Fox Business, el valor de mercado de la compañía ha caído en total 27 mil millones de dólares hasta ahora, ya que las acciones se acercan a un mercado bajista.
Aunque Gates no es un entusiasta de la cerveza, sus inversiones estratégicas en la industria están recibiendo una atención significativa. A medida que Heineken se ocupa de desinvertir en FEMSA, y Anheuser-Busch InBev enfrenta las repercusiones del boicot, es evidente que la industria cervecera está fuertemente influenciada por las cambiantes preferencias del consumidor y factores externos.