PUNTOS IMPORTANTES:
- EE. UU. y UE negocian un pacto comercial sin incluir aranceles.
- Se eximiría a empresas como Apple y Meta de la ley digital europea.
- La UE pospondría un año su regulación sobre deforestación.
Washington y Bruselas perfilan un pacto sin resolver aranceles
Estados Unidos y la Unión Europea están cerca de cerrar un acuerdo comercial limitado que aborda múltiples disputas económicas, aunque deja sin resolver el tema clave: los aranceles cruzados.
Un borrador del pacto, compartido por la oficina del Representante Comercial de EE. UU., incluye avances en temas como la Ley de Mercados Digitales de la UE, el mecanismo de ajuste de carbono, el transporte marítimo y la coordinación en sectores estratégicos.
Sin embargo, no contempla ninguno de los aranceles impuestos o amenazados por el presidente Trump, ni tampoco las represalias anunciadas por la UE, que entrarían en vigor el 14 de julio si no hay acuerdo.
La situación deja abiertos varios escenarios: que las conversaciones arancelarias se estén tratando por separado, que estén estancadas o que ambas partes busquen extenderlas más allá del 9 de julio, fecha límite fijada por Trump.
Exenciones para empresas de EE. UU. y ajustes en políticas verdes
Aunque no incluye compromisos arancelarios, el borrador ofrece alivios regulatorios a firmas estadounidenses. Entre ellos, una exención temporal a empresas como Apple (AAPL) y Meta (META) frente a la Ley de Mercados Digitales, que ya ha generado multas importantes.
También se plantea un aplazamiento de un año para aplicar la normativa europea contra la deforestación, una medida ya prevista desde finales de 2024 pero ahora formalizada en el documento.
En materia climática, el texto sugiere coordinar el diseño del arancel europeo al carbono, otorgando un año de exención a productos de EE. UU.. Las exportaciones energéticas estadounidenses también quedarían fuera de las reglas europeas sobre metano.
Se incluirían además disposiciones para incentivar el transporte marítimo desde economías de mercado y penalizar cargas desde China, una medida alineada con propuestas recientes del gobierno estadounidense.
El acuerdo llega tras intercambios intensos entre funcionarios de ambos lados, con el objetivo de concretar compromisos previos al 9 de julio. Aun así, persiste la duda sobre si la UE aceptará firmar un pacto sin contrapartidas claras por parte de EE. UU.
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