PUNTOS IMPORTANTES:
- Rusia planea fusionar Rosneft, Gazprom Neft y Lukoil para competir con Saudi Aramco.
- La nueva entidad podría financiar la economía rusa y el esfuerzo bélico en Ucrania.
- La operación enfrenta desafíos como sanciones y oposición interna de ejecutivos.
Rusia podría fusionar petroleras estatales para ser el segundo mayor productor del mundo
Rusia está evaluando un plan para combinar tres de sus gigantes petroleros, lo que podría convertirla en el segundo mayor productor mundial de petróleo, según informó The Wall Street Journal. La propuesta contempla que Rosneft Oil, respaldada por el Estado, absorba a Gazprom Neft, filial de Gazprom, y a la independiente Lukoil, según el informe.
Fuentes citadas por el Journal indicaron que la posible fusión ha sido discutida entre ejecutivos y funcionarios gubernamentales durante los últimos meses. Aunque la iniciativa no es nueva, enfrenta desafíos significativos, como la oposición de ejecutivos de Rosneft y Lukoil, y la financiación necesaria para comprar las acciones de los accionistas de Lukoil.
La estrategia detrás de la fusión
El informe señala que esta fusión forma parte del esfuerzo de Vladimir Putin para competir con Arabia Saudita, mientras la demanda de petróleo disminuye en medio de la transición hacia fuentes renovables. Si la operación se concreta, la nueva entidad fusionada sería una de las mayores productoras de petróleo del mundo, solo por detrás de Saudi Aramco, que en 2023 produjo casi 10 millones de barriles diarios, según datos de Rystad Energy UCube.
Además, el nuevo gigante produciría casi tres veces más petróleo que Exxon Mobil (XOM), el mayor productor de crudo de Estados Unidos. Los defensores de la operación argumentan que esta podría generar ingresos significativamente mayores, ya que la producción conjunta podría ser vendida a través de Litasco, la unidad de comercialización de Lukoil en Dubái.
Petróleo como clave económica y geopolítica
Este movimiento también apunta a financiar el esfuerzo bélico de Putin en Ucrania. El petróleo y el gas son pilares esenciales de la economía rusa, representando cerca de un tercio de los ingresos federales. Sin embargo, las sanciones occidentales han dificultado el comercio energético con socios internacionales.
Tanto Rosneft como Gazprom Neft y Lukoil están bajo sanciones, lo que complica aún más sus operaciones comerciales en el extranjero. El informe se publica en un contexto de precios del petróleo deprimidos durante este año, en parte debido a la prolongada desaceleración económica en China y a que el conflicto en Oriente Medio no ha afectado el suministro global.
Reacción oficial y posibles obstáculos
Algunos portavoces negaron la existencia de un acuerdo. Un representante de Rosneft calificó la información como incorrecta, mientras que un portavoz de Lukoil aseguró que la empresa no está involucrada en conversaciones de fusión, ya que no sería de su interés. Por su parte, un portavoz estatal declaró que la administración no tiene conocimiento de un posible acuerdo.