PUNTOS IMPORTANTES:
- Los exportadores chinos enfrentan incertidumbre por posibles aranceles más altos en Estados Unidos.
- La revocación del estatus MFN podría reducir significativamente el PIB de China y afectar empleos globales.
- El mercado interno chino no puede absorber el exceso de capacidad productiva del país.
Las exportaciones de China enfrentan un panorama sombrío con Trump
Los exportadores chinos están preocupados por las políticas proteccionistas que podrían surgir en la segunda administración de Trump. Aunque las exportaciones crecieron en octubre al ritmo más rápido en dos años, este incremento se debió principalmente a que las fábricas adelantaron inventarios hacia mercados clave como medida preventiva ante posibles nuevos aranceles por parte de Estados Unidos y la Unión Europea.
Este crecimiento se percibe como temporal, ya que la amenaza de una nueva guerra comercial genera incertidumbre en toda la cadena de suministro, desde transportistas hasta vendedores locales.
Empresarios enfrentan competencia interna y externa
Zhong Weiyi, de 58 años, dueño de una concesionaria en Chengdu, compartió que la posibilidad de nuevos aranceles exacerbará la competencia en el mercado automotriz chino. Zhong, quien vende autos de la marca local Chang’an, expresó:
“Aquí en China hay un número limitado de compradores potenciales. Esto me deja menos margen de maniobra. Tengo que reducir costos o buscar nuevas formas de atraer clientes”.
Las exportaciones de China hacia Estados Unidos están dominadas por productos como equipos electrónicos, maquinaria, vehículos, plásticos, muebles y juguetes, según estadísticas oficiales.
Liu Boyi, exportador de juguetes, incluidas figuras y juegos de mesa, comentó que los aumentos en aranceles aumentan la incertidumbre:
“Exportamos grandes volúmenes, pero con cada aumento arancelario, crecen nuestros temores”.
Aunque ha explorado mercados regionales como Japón y el sudeste asiático, la demanda no se compara con la de Estados Unidos.
Desafíos para satisfacer la demanda doméstica
El mercado interno chino no puede absorber el exceso de capacidad de producción, agravado por la debilidad en la confianza del consumidor tras la pandemia. Esto complica la transición de las empresas hacia una mayor orientación al mercado interno.
Además, existe un riesgo significativo si se revoca el estatus de nación más favorecida (MFN, por sus siglas en inglés) para China, lo que permitiría a Estados Unidos aplicar tarifas más altas en productos chinos. Según un estudio del Instituto Peterson, la revocación de este estatus podría reducir el crecimiento del PIB chino en hasta 1,5 puntos porcentuales y tener efectos duraderos en los mercados laborales de ambos países.
Impacto en sectores estratégicos y exportadores
Empresas como la de Wang Jian, que exporta partes de maquinaria a Estados Unidos desde hace casi dos décadas, ya han sufrido con los aranceles del 25% impuestos en 2018. Según Wang:
“Fue una gran disrupción, ya que Estados Unidos es nuestro mayor mercado. Si estos aranceles aumentan al 60%, como Trump ha amenazado, sería devastador”.
El gobierno chino enfrenta limitaciones para apoyar a sus exportadores, ya que muchos sectores operan con capacidad excesiva, especialmente en metales. Por ejemplo, la eliminación de un reembolso fiscal del 13% para ventas al extranjero de aluminio y cobre ha golpeado a los mercados de metales.
Wang, vendedor de metales, resumió la situación: “Es un desastre”.