Puntos importantes:
- Existen muchas dudas por parte de los inversores porque la situación no es la ideal en estos momentos, aunque podría cambiar en el corto plazo.
- La disyuntiva es la siguiente: hay optimismo porque la inflación está retrocediendo, pero hay temor de que el incremento en las tasas de interés cause una recesión.
- La semana pasada, el S&P 500 cayó un 0,7%, rompiendo una racha ganadora de dos semanas. Eso quiere decir que el mercado no tiene un rumbo claro, por lo que se espera mucha volatilidad.
El mercado de valores comenzó el año en verde pero todavía no se termina de confirmar una tendencia alcista. Los inversores están dubitativos y tienen argumentos para estarlo. La pregunta que todos se hacen es: ¿Conviene volver a comprar acciones en estos momentos?
Existe una disyuntiva muy marcada en el contexto actual. Por un lado hay optimismo porque la inflación se está desacelerando pero, por otro, la Reserva Federal sigue aumentando las tasas de interés, y los inversores temen que Estados Unidos entre en una recesión.
“El S&P 500 nunca ha tocado fondo antes del comienzo de una recesión, pero aún no está claro si la economía de EE. UU. caerá realmente en una recesión. Algunos indicadores nos dicen que un aterrizaje suave no está descartado. Todas estas corrientes cruzadas hacen que sea un desafío para los inversores posicionarse en acciones estadounidenses”.
Ed Clissold, estratega jefe para EE. UU. de Ned Davis Research.
La firma del estratega proyecta que hay un 75% de probabilidades de que Estados Unidos se sumerja en una recesión.
Los datos indican que la semana pasada el S&P 500 retrocedió un 0,7%, cortando una racha ganadora de dos semanas, aunque el índice repuntó un 1,9% el viernes. Esto indica la alta volatilidad con la que comenzó el año el mercado, y se podría extender con el agregado de los Earnings.
Esta semana será muy movida para las acciones. Empresas de renombre informarán sus resultados trimestrales como: Microsoft, Tesla, Verizon, General Electric, Johnson & Johnson, Mastercard, AT&T, Chevron, Boeing, Visa y American Express, entre otras.
Además, el Departamento de Comercio publicará el jueves su primera estimación del producto interno bruto de EE. UU. del cuarto trimestre, que se espera que muestre una aceleración.
«Soy optimista sobre las acciones estadounidenses este año, pero el mayor riesgo para las acciones es si la Fed aumenta las alzas. Las ganancias de esta semana de las empresas de tecnología podrían ser un gran catalizador. Otros rincones del mercado se están estabilizando. Pero si la tecnología cae muy fuerte, eso es un problema y el mercado no podrá recuperarse en general”.
Mark Newton, jefe de estrategia técnica de Fundstrat Global Advisors.
Los economistas de Bloomberg creen que el endeudamiento de Estados Unidos presionará a las ganancias de las empresas este año, y pronostica que el S&P 500 cerrará el año en casi 4.000 puntos, una cifra muy cercana a los niveles actuales. De igual manera, también elaboró un escenario alcista, que sería con un aumento potencial del 23% para finales de 2023.
Kevin Rendino, director ejecutivo de 180 Degree Capital, apuesta a que la recesión estadounidense ya comenzó, por lo que es una buena oportunidad para comprar acciones de pequeña capitalización, específicamente acciones tecnológicas y discrecionales.
“Mientras todos huyen, yo corro hacia esas acciones de pequeña capitalización golpeadas. Serán los primeros en descontar una recuperación, y ya están comenzando a hacerlo en relación con las grandes capitalizaciones. Los inversores anticipan una recesión, pero ya sea que estemos en una o no, no nos dirigimos hacia Armagedón”.
Rendino.